13.1.09

Diario de Yo - Dormido

Hoy me he dormido...¡qué le vamos a hacer! Así que repaso mentalmente la noche del viernes...y casi puedo decir que hay próximo bolo el 13 de Febrero en el Interferencias junto a Alfama. Cuando sea 100% seguro lo anunciaré como es debido. Tocaremos las mismas y alguna versión más, of course. Y ya no habrá tantos nervios...ni blue jokes...(chistes azules...se ve que en Inglaterra el azul es verde...). Mientras tanto seguimos igual...Primo de Rivera por aquí, el cine español por allá...Bolivar dando mal...esas cosas de historiador. Ayer Juako Malavirgen muy bien en la Morrisey, creo que cuando va él solo y es un día normal de necesidad es cuando mejor rinde...o mejor me lo paso. Hoy se saben los premios de la música aragonesa (no se preocupen que servidor pasa de esas cosas) y creo que alguna nominación se ha llevado (merecida a mi juzgar ya que en estos tiempos en que unos reclaman algo que no les pertenece a base de bombas el humor y el amor deberían ser la razón para terminar con todo), yo creo que voté con cabeza, sin objetividad pero con cabeza...por las mentes con ilusión, fuera los falsos disfraces ya!!
Supongo que en Febrero- Marzo, cuando vuelva de París y de Coimbra comenzaremos a grabar algo aunque sea una demo de las de antaño...las que sonaban realmente mal pero eran baratas.
Os dejo con un poema de mi segundo libro "La Soledad del Caracol":
El día que te marchaste sin apenas despedirte

Enredado entre las sábanas pidiendo tregua a una noche difícil,
Otra más sin victoria.
Un alma se escapa de la cama, silenciosa, lúgubre y piadosa,
Enfrenta su mirada con trémula sinceridad,
Su objetivo está rendido, soy yo, desnudo y somnoliento.

La mirada dura un segundo, quizás menos y pronto entona su mea culpa,
Marcha al lavabo y despeja las dudas en forma de legaña,
La noche había pasado y el hombre lobo ya no le asustaba
Pero llegaba tarde, otra vez más.

La prisa: la presa dentro de sí misma, calculó mal su madurez
Y mamá esperaba ansiosa la respuesta, niña vuelve a casa, por Navidad.
Caso omiso, el agua sigue corriendo, ella ya come en la cocina,
Él sigue arrastrándose con los pies llenos de cemento.

Llega el momento del adiós, nunca definitivo, quizás un hasta luego
Pero es el viento el que apaga el fuego, el maldito cierzo en forma humana,
Un cuerpo de mujer que bate sus alas, que vuela lejos de su hogar,
Fueron tres días no menos los que pendí de ti mientras soltabas cuerda.
Y ahora una grandísima recomendación...y eso que me los perdí cuando vinieron...
En tiempos de guerra...Wilco - War On War


No hay comentarios: