Gracias

Un suspiro en la aurora,
una cajita de música,
un reloj que se demora
desnudo de flor y tic-tacs.

Cinco y una mitad,
son tiempo suficiente
para comprobar que la verdad
se difuminó en el ambiente.

Ahora te digo gracias,
gracias mi vida por todo,
por robar tu juventud
y no caer en el lodo.

Me despediré como es debido
que aunque nos sobró la mitad
seguiré pensando en el que hubiera sido
toda la eternidad.

Perdona estos versos macabros
faltos de estilismo y con demasiados fallos.
Mea Lesbia se marchó al final
dejando un rastro en mi felicidad.

Gracias por ser mi musa durante todo este tiempo, ahora solamente espero tu amistad.